Cómo superar la maldición de los huérfanos con la tecnología

Por Kat Walraven JOHANNESBURGO, Sudáfrica,

En los países en desarrollo el VIH/sida es la causa del creciente número de niños y niñas huérfanos que asumen prematuramente la responsabilidad de cuidar a sus hermanos/as. En Uganda no es raro encontrar niños y niñas – sobre todo varones – de ocho años a cargo del hogar. Los varones suelen asumir esta responsabilidad porque la cultura de ese país así lo prescribe, aun cuando haya hermanas de más edad. Por otra parte, dado que otros parientes mayores suelen contar con recursos limitados y se ven obligados a elegir entre los niños y niñas que quedan huérfanos, las favorecidas suelen ser las niñas, porque se supone que son más vulnerables que los varones.


DSI.ORG, una pequeña organización sin fines de lucro del distrito occidental de Kabarole, en Uganda, acaba de lanzar el proyecto Diario. El objetivo es fortalecer la llamada Red de grupos de sensibilización (Awareness Sharing Group Network), perteneciente a la misma organización, a fin de brindar apoyo a las familias de huérfanos/as a causa del VIH/sida y cuyo jefe es un niño. Se trata de ayudar a los/as afectados/as a lidiar con el dolor, el estigma y la discriminación que sufren mediante el intercambio de experiencias y conocimiento, y el trabajo conjunto. El proyecto se sumará a la base de conocimientos que comparte la red y capacitará a los/as integrantes de dicha red para el uso de tecnologías de la información y comunicación (TIC) en zonas rurales.


Durante el primero de los seis meses que durará el proyecto, los miembros recibirán capacitación para administrar las actividades de la red – sobre todo, teléfonos de pueblo (“village phones” inspirados en el experimento de Grameenphone se proporcionar telefonía celular a pueblos que no tienen acceso a teléfonos fijos) que serán operados por los niños para generar ingresos. Los talleres se desarrollarán durante los fines de semana para que los niños no falten a la escuela y cubrirán temas como TIC y técnicas de intercambio de conocimiento; uso de la telefonía para el desarrollo personal y empresarial, y derechos de salud reproductiva, así como trabajo en equipo y manejo de conflictos.


El proyecto Diario debe su nombre al hecho de que el conocimiento y las experiencias de los miembros serán documentados y puestos a disposición de la comunidad. Durante el sexto y último mes, todos los miembros participarán de un foro de intercambio de conocimientos sobre el tema. La información que se compartirá en esa reunión será registrada en un cassette de audio y se utilizará para la realización de folletos, a fin de ampliar el alcance de la red. Así, los miembros no sólo tendrán más información para su desarrollo personal y profesional, sino que además actuarán como puntos de difusión de conocimiento hacia beneficiarios secundarios como otros niños y niñas, parientes, escuelas y líderes comunitarios/as.


Faridah Namutebi, directora of DSI.ORG, señaló que el proyecto Diario se distingue que otras iniciativas de la organización por su sustentabilidad y su visión a largo plazo. El proyecto les brinda a los niños algunos conocimientos que durarán toda la vida y les ofrece diversas oportunidades para generar ingresos, con lo que les permite tener una vida mejor. Además, el hecho de enterarse de sus derechos de salud reproductiva y de ser estimulados a adoptar actitudes masculinas positivas los ayudará a convertirse en “padres responsables el día de mañana”. Se los alienta a tener familias más pequeñas, a compartir la responsabilidad de las decisiones financieras con sus esposas, y a ser capaces de amar con lealtad. La participación en el proyecto Diario y en la red aumentará la autoestima de los niños y el respeto por parte de los miembros de la comunidad, debilitándose así el mito de que los niños huérfanos constituyen una maldición para la sociedad.




Autor: —- (Kat Walraven)
Contacto: katwalraven [arroba] gmail.com
Fuente: APCNoticias
Fecha: 09/04/2007
Localidad: JOHANNESBURGO, Sudáfrica
Categoría: Capacitación y TIC



« Volver