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Si bien es notable el enorme progreso que ha habido en cuanto el reconocimiento de que las amenazas y los abusos por cuestiones de género en contextos digitales se pueden abordar desde una perspectiva de derechos humanos, el impacto que tienen la desigualdad de género y las operaciones e incidentes cibernéticos a nivel internacional sobre las mujeres y las niñas sigue siendo una parte poco explorada del discurso en los foros y procesos dedicados a la ciberseguridad.
En este sentido, existen herramientas, agendas y abordajes relevantes a los que pueden recurrir las personas responsables de formular políticas de ciberseguridad cuando se trata de promover la perspectiva de género dentro de la ciberseguridad local, o multilateral. Según Brown y Pytlak, esos instrumentos se pueden utilizar como fuente de información, o para establecer una coherencia política con los compromisos ya asumidos de los Estados con la igualdad de género.1
Este trabajo, que forma parte de un marco elaborado por la Asociación para el Progreso de las Comunicaciones (APC) para promover una política de ciberseguridad que incluya las cuestiones de género, presenta una visión general de los instrumentos más relevantes. Considera específicamente:
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La Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW)
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La Declaración de Beijing y la Plataforma de Acción
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Agenda Mujeres, paz y seguridad (MPS), tal como se estableció en la Resolución 1325 del Consejo de Seguridad de ONU y los Planes de Acción Nacional de MPS
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Documentos finales de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información (CMSI)
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La Agenda 2030 para el desarrollo sostenible y los Objetivos de desarrollo sostenible
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Informes y resoluciones del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas
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Iniciativas de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT)
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Procesos de ciberseguridad del sistema de Naciones Unidas
