Las redes de mujeres y las TIC: características y desafíos enfrentados por el Programa de apoyo a las redes de mujeres de APC

Por el Programa de apoyo a las redes de mujeres de APC (PARM de APC)

El PARM de APC comenzó a principios de los ‘90 y es una de las redes de mujeres en internet más fuertes del mundo. El presente artículo está basado en textos del kit Mujeres en sintonía: una publicación en tres partes sobre el trabajo en red electrónico de mujeres1.

*Un relato personal*2

‘…¡averigua lo que puedas sobre eso del “correo electrónico”!.

Así sonaban las palabras de mi director en junio de 1991. Recién llegado de un congreso en el norte de Inglaterra, estaba totalmente entusiasmado con los medios de comunicación experimental vía computadoras y teléfonos. Una forma de comunicación más duradera que el fax, más barata que el teléfono, capaz de transmitir información en un formato que puede reproducirse una y otra vez.

Para saber más acerca de esta tecnología hablé con Graham Lane, el encargado de Tecnología de la Información de Amnistía Internacional y autor de “Communications For Progress” (en aquel entonces, un importante estudio del uso de las comunicaciones informáticas por parte de activistas y ONG (organizaciones no gubernamentales). Graham me presentó a Mike Jensen3, técnico de GreenNet.

Mike estaba experimentando con Fidonet para intercambiar información entre dos computadoras utilizando una línea telefónica como conductor. Los mensajes se escribían usando software especial en “DOS”, luego se los agrupaba, se los comprimía a aproximadamente veinte veces el tamaño original, se hacía una llamada telefónica de una computadora a otra vía módem y el bulto era entonces enviado por línea telefónica –un poco a la manera en que los troncos flotan en el río- hacia una destinación a miles de kilómetros de distancia.

Poco después se creó un “centro” de comunicaciones en GreenNet que intercambiaba mensajes de correo electrónico vía conexiones telefónicas diarias a más de 40 centros de comunicaciones de Africa, sudeste de Asia y Europa Central y Oriental. El centro de comunicaciones de Londres se llamaba ‘GnFido’ (GreenNet Fidonet).4

La ingeniosa combinación de tecnología por computadora y de comunicaciones me intrigaba terriblemente y, en seis meses, me había convertido en la “operadora de sistemas” del portal GreenNet-Fido. Ya era ‘técnica’ y estaba enganchada.

La cumbre de la tierra y la oficina de trabajo de red de mujeres (1992) 5

En 1991, GreenNet estaba trabajando con más de 800 ONG de Reino Unido y Europa. Estas ONG trabajaban principalmente sobre medio ambiente, desarrollo y derechos humanos, y muchas de ellas se estaban preparando para la Conferencia Mundial de la ONU sobre Desarrollo y Medio Ambiente, más conocida como Cumbre de la Tierra.

En junio de 1992, personal de diversos miembros de APC conformaron un equipo para implementar, por vez primera, servicios de comunicación por computadora en el lugar para las 17.500 ONG delegadas presentes en el foro paralelo de ONG durante la Cumbre de la Tierra.6 El efecto de este servicio fue evidente en muchos aspectos; en la actualidad, suelen ser provistos directamente por Naciones Unidas, generalmente en asociación con redes de ONG tales como APC. Hoy en día damos por sentados dichos servicios durante el desarrollo de eventos regionales o internacionales pero en aquella época, el Centro de Comunicaciones de ONG de la Cumbre de la Tierra era una innovación que llegaba desde el futuro.

Inspirado en esta experiencia, un grupo de mujeres de varias organizaciones miembro de APC reconocieron la necesidad de trabajar para el movimiento de mujeres que trabajan por el desarrollo y el medio ambiente en el ámbito internacional, de la misma manera que hasta ese entonces pero en forma más coordinada.

El camino a recorrer no fue nada simple; los obstáculos enfrentados por las mujeres durante la apropiación de esta poderosa tecnología fueron muchos, incluso varios de nuestros colegas no veían que las mujeres serían aún más marginadas si se les negaba acceso a explorar y apropiarse por completo de dicha tecnología. Tuvimos dificultades en explicar a los donantes cuán importante era que brindasen asistencia en esta área de trabajo. Nos costó obtener permiso de administradores para asignar tiempo a este trabajo. Tuvimos dificultades para explicarle a la gente exactamente qué era lo que habíamos hecho. Para muchas mujeres, estas barreras siguen existiendo.

Las mujeres construyeron la red 7

El programa de Apoyo a Redes de Mujeres de APC, (APC PARM) comenzó oficialmente en 1992. En 1993, el número de miembros de APC había aumentado y se habían creado relaciones entre socios del sudeste de Asia, Africa y Europa Central y Oriental. Más de veinte mujeres parte del personal y colegas de redes socias y miembros de APC trabajaban de manera initerrumpida para concientizar a la gente y obtener apoyo para un programa internacional de apoyo a redes de mujeres. Este trabajo no siempre fue una prioridad ni tampoco considerado como central en el trabajo de miembros de APC, algunas mujeres encontraron una red miembro de APC muy solidaria y otras no tuvieron la misma suerte. En cualquiera de las dos situaciones, como es de prever, las mujeres trabajaron horas extra durante su tiempo “libre”; eran técnicas, trabajadoras de la información, directoras de proyectos, trabajaban en finanzas, eran coordinadoras y directoras ejecutivas, de más de quince países diferentes. En grupo, contaban con la capacidad y experiencia necesarias para trabajar hacia la visión compartida de una sólida red de mujeres en Internet.

Todas las mujeres que se interesan en el programa, pertenezcan o no a APC, son activistas; ya sea desde el punto de vista político o personal: estas mujeres trabajan, a través de acciones (ya sea concientización, capacitación, cabildeo, trabajo de campañas, organización de talleres o a través de la escritura) para exponer las injusticias a las que se enfrenta la gente (y en la mayoría de los casos específicamente las mujeres) y la lucha que lideran para corregir dichas injusticias. Muchos de los miembros trabajan en áreas tales como derechos humanos, derechos de la salud y reproducción de las mujeres, violencia contra las mujeres, las mujeres y los conflictos armados y el fortalecimiento económico de la mujer.

La mayoría de las veces trabajan con grupos de mujeres de sus propias comunidades y por lo tanto desempeñan la importante función de ‘puentes’ o ‘agentes’ entre los foros y redes de apoyo en los ámbitos internacional y local, regional y local y nacional y local.

En general, utilizan la información y la tecnología como herramientas de trabajo.

¿A quién representan los miembros? 8

Uno de los principales puntos fuertes del programa ha sido su abordaje abierto a los diferentes tipos de miembros. Los miembros del programa pueden representar una organización de mujeres, una red de medios de mujeres o el personal de una red en Internet, el personal de APC o de organizaciones miembro de APC. Existen también miembros individuales.

Un espacio seguro y segurizado 9

En un mundo en el que los microsegundos miden los logros de la gente, en el que los microchips almacenan increíbles cantidades de compleja información técnica y donde los procesadores llevan a cabo cálculos a una velocidad que aumenta diariamente en proporciones geométricas, uno de los factores que contribuye a la construcción de una red sólida es el tiempo: gran atención al tiempo.

Los dos años preparativos a Beijing10, primer y principal proyecto del PARM de APC, estuvieron dedicados a fortalecer y enlazar las redes de mujeres ya existentes a través de un largo, lento y sólido proceso de creación de una relación basada en la confianza.

Es interesante que el PARM de APC haya sobrevivido y crecido en tiempos en que existían pocos o casi ningún subsidio, las razones para ello están relacionadas a los aspectos menos visibles del programa, aquellos relacionados con el lado ‘humano’ del trabajo; los mentores, el apoyo económico, la solidaridad y el hecho de que el programa apunta a hacer aportes significativos y por lo tanto formar parte de la vida de las mujeres. Otro de los aspectos menos evidentes del programa, y más difiícil de “cuantificar”, es la manera en que las mujeres crean redes de trabajo.

Un espacio exclusivo para mujeres y dirigido por mujeres 13

Uno de los aspectos importantes de este entorno solidario ha sido la práctica de un espacio de trabajo exclusivo para las mujeres y la insistencia en que ellas debían ocupar todos los puestos de dirección. Esta práctica se denomina ‘women-led’ (dirigido por mujeres).

Los espacios de planificación electrónicos del programa son casi sin excepción privativos de las mujeres; hay excepciones en los ámbitos regional y nacional pero en dichas situaciones, los hombres que participan son considerados como aliados que comprenden la importancia de, por un lado, brindar apoyo y compartir conocimientos y habilidades y por otro lado respetar la filosofía ‘women-led’ del programa; las únicas dos formas en que las mujeres pueden trabajar y darse espacio unas a otras.

A principios de los noventa, muchos colegas hombre brindaban asistencia técnica, moral o de otro tipo. En algunos casos, estos hombres eran identificados como puntos focales en lugares donde no se habían desarrollado relaciones con mujeres o grupos de mujeres. Gran parte de nuestra experiencia de hombres que se incorporaban a los espacios de trabajo del programa ha sido positiva. El hecho de que se hayan tomado el tiempo y el esfuerzo de comprometerse en dicho trabajo ha sido casi siempre la expresión exterior de su reconocimiento y aceptación de la manera en que nosotras trabajamos. Cuando la motivación para unirse a dicho espacio significó la expresión de los derechos del hombre a trabajar en el mismo, surgían tensiones y sospechas y el efecto de su compromiso se sentía de manera menos constructiva.

Consolidación y actividad 12

Durante los dos años previos a la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer de Beijing de 1995(13), los grupos de mujeres iniciaron encuentros tentativos con la nueva tecnología, muchos de los proyectos e iniciativas de trabajo en red electrónico respondían a las nuevas cuestiones del momento. Estas cuestiones siempre tenían que ver con el acceso a la capacitación, crédito, equipos y conocimientos; el de las nuevas tecnologías sobre la vida ya cargada de las mujeres, la adecuación de una tecnología que está fuertemente centrada en el hombre, cara y muchas veces producida en el hemisferio norte, además de cuestiones sobre seguridad y privacidad. Estaba también la cuestión del idioma, y en una Internet dominada por los contenidos en idioma inglés, ésta sigue siendo una barrera aparentemente imposible de atravesar.

Más allá de estas cuestiones y barreras, las mujeres de APC y sus colegas de otras organizaciones comenzaron a vincularse y a prepararse para la Conferencia de Beijing. Aprovechando esta oportunidad, el comité organizador del PARM de APC implementó una serie de actividades que dieron el empujón inicial al programa.

Las actividades iniciales implementadas por el comité coordinador del PARM incluyeron:

§ Documentación de nombres y números de mujeres y de grupos de mujeres que utilizaban el correo electrónico en aquella época (40 cuando comenzamos)
§ Organización de contenidos (sobre temas tales como salud, violencia, trabajo, medio ambiente y desarrollo) en grupos de noticias electrónicos
§ Hacer que dichos contenidos estén a disposición de todos los grupos de mujeres que utilizan correo electrónico de los cuales estábamos al tanto (la política de APC en ese entonces era brindar acceso a los grupos de noticias de APC sólo a los usuarios de las redes de APC. El PARM de APC trabajó para cambiar esta política en relación con la importancia y relevancia del contenido para las mujeres.)
§ Instar a cada socio y miembro de APC a identificar un ‘punto focal’ para el PARM
§ Establecer conexiones y relaciones con dichos puntos focales
§ Recaudar fondos para subsidiar el costo de recepción de contenidos para las mujeres, especialmente para aquellas que habitan en el hemisferio sur. En aquella época éste era uno de los aspectos críticos de nuestro trabajo, el costo de acceso al correo electrónico era prohibitivo para la mayoría de las mujeres incluso para aquellas que tenían una computadora y una línea telefónica. Los subsisdios muchas veces decidían la participación o no de las mujeres.
§ Instar a las mujeres a crear sus propios grupos de noticias electrónicos, especialmente en el ámbito regional. En 1993, no había más de seis grupos de noticias electrónicos dedicados a temas de mujeres localizables a través de las redes de APC. Hacia fines de 1997 había más de 50.

Además, el ‘Gender and Information Technology Project’ (Proyecto sobre género y tecnologías de información) que duró de 1993 a 1996 y que estaba financiado por el CIID (Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo) brindó la oportunidad para realizar talleres de capacitación sobre políticas y técnica en Africa, Asia y Latinoamérica para las mujeres técnicas, de asisitir a talleres técnicos de países en vías de desarrollo de la Internet Society, a talleres de capacitación de y entre mujeres y de llevar a cabo investigaciones innovadoras sobre el uso de las TIC por parte de las mujeres14.

El futuro

Hace cinco años la principal preocupación del PARM de APC era crear conciencia acerca de la importancia de que las mujeres se comprometiesen con las TIC, responder a cuestiones de acceso y conexión básicas, brindar posibilidades de capacitación y materiales y debatir acerca de los denominados beneficios de unirse a la “superautopista de la información”.

En la actualidad un número muy superior de mujeres utiliza las TIC en su trabajo si bien los temas identificados cinco años atrás siguen siendo cruciales para la mayoría de las mujeres de todo el mundo. La mayoría de las mujeres siguen sin tener acceso a una línea telefónica, sin hablar de una computadora, concocimientos informáticos ni de explotación de las nuevas tecnologías. En el año 2000 nos enfrentarnos a temas y desafíos tales como:

§ La rápida comercialización de Internet en la que las mujeres son vistas como un importante ‘mercado objetivo’;
§ La creciente convergencia de los medios masivos internacionales con el poder de Internet, tal como la fusión comercial entre el imperio mediático de Ted Turner y America OnLine (AOL) que amenaza bombear contenidos homogeneizados a todos los hogares para el año 2005;
§ Intensificación de intentos por parte de los gobiernos por restringir el acceso a Internet a través de la creación de legislación para regular su utilización
§ La creciente importancia de organismos de comercio internacionales que trabajan para encauzar los términos del intercambio de ‘productos de información’ y de ‘conocimiento’.

Es este contexto, las prioridades del PARM de APC para los próximos años se centrarán en la capacitación, las políticas y el cabildeo además de ampliar las capacidades de la red.

Referencias

1 Resúmenes extraídos de “Networking for Change: The APC WNSP’s First Eight Years” (Trabajando en red por el cambio: los primeros ocho años del PARM de APC), PARM de APC, 2000
2 Relato personal de la coordinadora del PARM de APC, Karen Banks, acerca de cómo empezó su trabajo de red por computadora, extraído de “Networking for Change: The APC WNSP’s First Eight Years”, PARM APC, 2000 pp. 1-2
3 Ver también: Brian Murphy “Mike Jensen y el Código que mantuvo unida a APC: la época pre-Internet, primeros intentos de enlace de nodos de APC”, Informe anual de APC, 2000
4 Ver también: Karen Banks “Fidonet: la tecnología del mínimo necesario”, Informe anual de APC, 2000
5 “Networking for Change: The APC WNSP’s First Eight Years”, APC WNSP, 2000, pp. 3-4
6 Ver también: Rory O’Brien “Posibilitar la participación de la sociedad civil en política internacional: APC y las Naciones Unidas”, Informe anual de APC, 2000
7 “Networking for Change: The APC WNSP’s First Eight Years”, APC WNSP, 2000, pp. 5-10
8 “Networking for Change: The APC WNSP’s First Eight Years”, APC WNSP, 2000, pp. 11
9 “Networking for Change: The APC WNSP’s First Eight Years”, APC WNSP, 2000, pp. 11
10 Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer de Beijing, China, 1995.
11 “Networking for Change: The APC WNSP’s First Eight Years”, APC WNSP, 2000, pp. 12-14
12 “Networking for Change: The APC WNSP’s First Eight Years”, APC WNSP, 2000, pp. 14-16
13 Ver también: Rory O’Brien “Posibilitar la participación de la sociedad civil en política internacional: APC y las Naciones Unidas, Informe anual de APC, 2000
14 http://community.web.net/apcwomen

Fuente

Informe anual APC, 2000.

Español
« Volver