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La República de Corea tiene uno de los porcentajes de conectividad a internet por banda ancha más altos del mundo, pero está rezagada en cuanto a las libertades en internet. El país ha realizado grandes avances desde la restauración de un sistema político multipartidario 1987, tras décadas de regímenes autoritarios y militares. Juega un papel activo a nivel internacional, entre otras cosas como miembro del Consejo de Derechos Humanos, y ratificó la mayoría de los tratados internacionales sobre derechos humanos, incluso los que habilitan las denuncias individuales. No obstante, en los últimos dos años se ha producido una reducción de la libertad de expresión en el país, en primer lugar debido a nuevas y más restrictivas interpretaciones y aplicaciones de las leyes existentes.

Corea, donde más de 80% de los hogares tienen acceso a una conexión rápida a internet por banda ancha, tiene uno de los niveles más altos de conectividad a internet de la región y del mundo. Los ciudadanos realmente se propusieron convertirse en “ciberciudadanos” y ha surgido una cultura en línea activa y vibrante, que incluye el intercambio de puntos de vista y opiniones diversos en los foros de discusión. En la sociedad coreana, internet se ha convertido en una herramienta indispensable para ejercer el derecho a buscar, recibir y trasmitir información e ideas, y para vehiculizar el cambio social.

ONU critica “amenazas a la libertad”

Sin embargo, en su segunda visita al país, el relator especial de ONU Frank LaRue reporta que la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y expresión no es lo que podría ser. LaRue concluye: “Me preocupa que en los últimos dos años se haya visto afectada la libertad de expresión en la República de Corea, principalmente debido a nuevas y más restrictivas interpretaciones y aplicaciones de las leyes existentes”.

Va aún más lejos al agregar: “Para que la República de Corea sea un líder en el plano internacional, debe mostrar al mundo no sólo su capacidad económica y tecnológica, sino también su compromiso con un modelo verdaderamente democrático de gobierno, con pleno respeto a los derechos humanos”.

El miembro de APC Jinbonet, que trabaja para garantizar las libertades en internet en este país, respalda las conclusiones del relator especial de ONU. El representante de Jinbonet Chang Yeokyung dijo que “la libertad de expresión en internet atraviesa una grave crisis en Corea. Los ciberciudadanos de Corea deben estar dispuestos a permitir que sus artículos sean suprimidos, o a recibir una acusación penal por publicar una opinión crítica hacia el gobierno”.

El libre flujo de información choca con la represión

Chang alienta a la ONU a definir más su posición: “El Consejo de Derechos Humanos de ONU debería recomendar oficialmente al gobierno coreano que resolviera los problemas subrayados”. No obstante, dice: “se espera que el gobierno coreano niegue la veracidad del informe.”

“La libertad de expresión en internet no puede darse por sentada,” dice Anriette Esterhuysen, directora ejecutiva de APC. APC aboga por derechos humanos en internet en la arena política global y nacional. “Cada vez más gobiernos y sistemas jurídicos responden con miedo y represión a la capacidad de internet de fortalecer el libre flujo de la información. Jinbonet tiene la solidaridad y el apoyo de toda la red de APC en su lucha por el derecho a decir lo que piensa, en beneficio de una mayor transparencia y justicia.”

Dada la importancia capital de la libertad de opinión y expresión en la construcción de estados democráticos fuertes, el informe de ONU recomienda a Corea priorizar el tema la libertad de expresión.

Informe completo del Relator especial de Naciones Unidas sobre la promoción y protección de la libertad de opinión y expresión en la República de Corea.

Imagen de la portada de Eloquence. Usada bajo licencia Creative Commons 2.0.

Foto de www.newscham.net. Tomada por la el Sindicato Nacional de Trabajadores del Metal.