INFORME DE APC: Financiación de las tecnologías de la información y la comunicación para el desarrollo en la PrepCom 2

Por Willie Currie, APC NUEVA YORK, EEUU,

“La gobernanza en internet es importante… lo sería aún más si la gente TUVIERA internet… ¡HABLEMOS PRIMERO DE LA FINANCIACIÓN!”, decía una camiseta hecha por los activistas de Bangalore, IT for Change (Tecnologías de la información para el cambio).


La financiación de las tecnologías de la información y la comunicación para el desarrollo (TIC para el desarrollo) suele ser un asunto opaco.Y también se trata de una cuestión fuertemente ideológica.


La Fase 1 de la CMSI (que culminó con una cumbre en Ginebra, en diciembre de 2003) generó un bloqueo entre los países en desarrollo y los industrializados respecto de quién debería financiar la sociedad de la información. Surgieron dos perspectivas contrarias sobre cómo habría que hacerlo: los países en desarrollo insistían en la creación de un “fondo de solidaridad digital” y los países industrializados opinaban que los mecanismos de financiación existentes eran más que adecuados si los países en desarrollo los utilizaran de manera más efectiva.


En la Fase 1 de la CMSI se creó el Grupo de trabajo sobre mecanismos de financiación para salir del bloqueo y presentar recomendaciones.1 En la segunda reunión preparatoria para la CMSI que se llevó a cabo en Ginebra del 17 al 25 de febrero de 2005, se presentó el informe final del citado Grupo de trabajo para su discusión y negociación. El lenguaje final que se eligió constituye la base de la declaración final de la CMSI que será firmada por los gobiernos en Túnez a fin de año.


Finanzas públicas/privadas en las discusiones intergubernamentales


El debate intergubernamental sobre los hallazgos y conclusiones del informe del Grupo de trabajo fue muy intenso. Uno de los puntos clave fue el peso relativo de las finanzas financiación públicas y privadas en la financiación de TIC para el desarrollo.


En las secciones que se le agregaron al texto acordado al término delde la PrepCom se reflejan cuatro aspectos de dicha discusión:


“24. En el pasado, la financiación de infraestructura de TIC en la mayoría de los países en desarrollo se basaba en la inversión pública. Ultimamente, ha habido un flujo significativo de inversiones para el cual se ha fomentado la participación del sector privado dentro de un marco regulatorio seguro y también se implementaron políticas públicas que apuntan a superar la brecha digital.


28. Destacamos que las fuerzas del mercado, por sí mismas, no pueden garantizar la participación plena de los países en desarrollo en el mercado mundial de servicios habilitados por las TIC.


30. Reconocemos que, como resultado del creciente impacto de las inversiones sostenibles del sector privado en infraestructura, los donantes multilaterales y bilaterales están reconduciendo los recursos públicos hacia otros objetivos de desarrollo, incluso Programas de estrategia de reducción de la pobreza, reformas políticas, oficialización de las TIC y desarrollo de la capacidad. Alentamos a todos los gobiernos a darle la prioridad adecuada a las TIC, incluso las tradicionales, como la radio y la televisión, en sus estrategias nacionales de desarrollo. También alentamos a las instituciones multilaterales, así como a los donantes públicos bilaterales, a considerar la posibilidad de brindar más apoyo financiero para los proyectos nacionales y regionales de infraestructura de TIC de gran escala y el desarrollo acorde de capacidades.


31. Reconocemos que la financiación pública tiene un rol fundamental en el suministro de acceso y servicio de TIC en las zonas rurales y otros grupos en desventaja., además de para la gente carenciada”.2


Esto puede constituir una reconfiguración de la relación entre las finanzas públicas y privadas de TIC para el desarrollo que, en efecto, traslade la expectativa previa de que alcanzaría con los fondos del sector privado para cubrir las necesidades de infraestructura de TIC de los países en desarrollo, a la posición desdeen la cual los dineros públicos tienen un rol importante en la financiación de infraestructura de TIC, en el nuevo contexto económico surgido a raíz del vuelco de las telecomunicaciones donde no se consiguen fondos privados para proyectos a gran escala con tanta facilidad como en el momento del auge de las telecomunicaciones, en los años 90.


Enfoques y prioridades de la sociedad civil


Dentro de la sociedad civil, hubo una diferencia de puntos de vista entre el Caucus de Finanzas de la CMSI, que no presentó ningún aporte formal antes delde la PrepCom 2, y varios grupos de la sociedad civil que estaban trabajando con temas de financiación en diferentes espacios – Africa, América Latina y el Caribe, y Asia meridional.


Varios grupos de la sociedad civil, entre ellos APC, Bread for All, Campaña CRIS, Digital Divide Data, IT for Change y el Instituto del Tercer Mundo (ITeM) organizaron un evento previo ala la PrepCom en el cual se presentó una lista de aportes sobre el tema de la financiación. Esas organizaciones trabajaron con el Caucus de financiación en la elaboración de una declaración conjunta para presentar en la conferencia plenaria de gobiernos. A último momento, el Caucus de financiación retiró su apoyo, así que las organizaciones presentaron por su cuenta la declaración ante la asamblea de delegados y delegadas.3 También formaron una coalición informal de financiación y se dedicaron a plantear sugerencias específicas para enmendar el Capítulo Dos de Finanzas que había antes del plenario gubernamental. Las propuestas presentadas se reflejaron en la versión siguiente del Capítulo Dos, donde figura la documentación de la CMSI sobre financiación, junto con las enmiendas gubernamentales.


La coalición dedicó el resto delde la PrepCom a monitorear los debates de los gobiernos y a presionarcabildear con a las delegaciones gubernamentales para que se mantuvieran las enmiendas al Capítulo Dos. Muchas veces sucede que durante la revisión de documentos oficiales se elimina lo que grupos específicos, e incluso gobiernos, decidieron incluir luego de una ardua tarea.


La coalición informal de finanzas apoyó la designación de un nuevo rol en el caso de las finanzas públicas de TIC para el desarrollo y también sostuvo que las iniciativas y redes comunitarias de TIC para el desarrollo representan una contribución importante para el empoderamiento social y el desarrollo sostenible. El activismo de la coalición fue un éxito ya que ambos aspectos fueron agregados al Capítulo Dos, con el apoyo de las delegaciones gubernamentales del mundo en desarrollo y del industrializado.


El trabajo que logró llevar a cabo la coalición dentro de los estrechos límites marcados por las delegaciones de gobierno destaca una serie de temas relativos a la organización de la sociedad civil:


1. El monitoreo de los procesos de gobierno en las reuniones de la ONU lleva demasiado tiempo. Requiere una atención permanente y suele hacerse a expensas de la participación en otros acontecimientos de la sociedad civil, o de horas extra. Las reuniones de gobierno suelen hacerse a partir de las 10 de la noche;


2. La presentación de textos escritos puede causar un impacto mayor que cualquier discurso que se haga ante los gobiernos reunidos. Los aportes orales de la sociedad civil, incluso en los plenarios, se suele ignorar;


3. PresionarCabildear con a las delegaciones de gobierno también es una tarea ardua que requiere concentración. Las reuniones diarias de la sociedad civil se hicieron, a menudo, mientras los gobiernos aún estaban reunidos, lo cual hizo que a la coalición de finanzas le resultara difícil hacer una devolución en el espacio más amplio de la sociedad civil. Los activistas que monitorean e influyen sobre los procesos de gobierno tienen una doble carga, porque deben encontrar la energía o el tiempo necesarios para contribuir con procesos paralelos de la sociedad civil al mismo tiempo.


Una nueva configuración de las políticas de TIC para el desarrollo y los mecanismos de financiación


El modo en que se traduzca a la práctica la nueva relación entre lo público y lo privado, y la inclusión de financiación y roles comunitarios, será clave para el futuro de la sociedad de la información y el apoyo que signifiquen las TIC para alcanzar las metas nacionales de desarrollo y los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM).


En cierto sentido, este es el punto clave de negociación del proceso de la CMSI en finanzas. Parecería que esta nueva configuración de finanzas públicas y privadas fue acordada para alinear los mecanismos de financiación existentes con las prioridades nacionales de desarrollo en los términos del Consenso de Monterrey y la Declaración de Objetivos del Milenio, y a cambio de suspender las presiones ejercidas sobre los países industrializados y los donantes, a los cuales se les exigía la creación de un nuevo fondo mundial de TIC dedicado a financiar la extensión de la sociedad de la información hacia los países en desarrollo. Esto es de suma importancia para el trabajo futuro de extensión de la infraestructura y el acceso a las TIC, así como la capacidad de uso de las mismas y la adecuación de los contenidos y aplicaciones a las regiones rurales y sin servicio del mundo en desarrollo.


También ayuda a poner en perspectiva el buen recibimiento que le dieron los gobiernos del mundo en desarrollo al Fondo de Solidaridad Digital.


El acuerdo por el cual el Fondo de Solidaridad Digital es voluntario y está abierto a los interesados lo convierte en un mecanismo de financiación complementario del abanico de los ya existentes para las TIC para el desarrollo. El éxito del Fondo dependerá de los interesados.


A la vez, el nuevo reconocimiento del papel de las finanzas públicas en las TIC para el desarrollo abre un nuevo espacio para tomar en serio a las zonas rurales y sin servicio, así como para introducir nuevos modelos políticos y financieros de TIC para el desarrollo, encon base en a bienes públicos, finanzas públicas y “acceso abierto” a los enfoques sobre infraestructura.


Además, dirige la atención hacia el importante cambio que está ocurriendo respecto de la Ayuda Oficial para el Desarrollo (AOD), sobre todo en el contexto de los ODM –es decir, el hecho de otorgarle prioridad a las TIC para el desarrollo dentro de la estrategia nacional de desarrollo depende de cada gobierno del Sur, y también depende de ellos lo que ahora se conoce como estrategias de reducción de pobreza en base a los Objetivos del Milenio.


Para que se otorgue prioridad a las TIC en este tipo de estrategias más generales de desarrollo, no sólo habrá que tratar el tema de la generalización de las TIC para el desarrollo, sino que, en muchos casos, habrá que hacerlo en situaciones en las cuales aún no se habrá terminado de preparar la infraestructura física, los procesos políticos, y/o la conciencia de la comunidad del desarrollo en general. El espacio para repensar las políticas de TIC para el desarrollo y trabajar a partir de su papel como facilitadoras del desarrollo está disponible y, además, es imperativo hacerlo para concretar una agenda inclusiva de desarrollo.


Así que, en síntesis, lo que está por suceder como resultado de la CMSI, al igual que otros movimientos en el ambiente del desarrollo, constituye un cambio fundamental en el enfoque sobre financiación de TIC para el desarrollo y los desafíos y oportunidades que plantea esta nueva configuración.


La financiación de infraestructura por parte del sector privado es importante pero ya no se considera la única fuente posible de fondos para infraestructura de TIC; la Ayuda Oficial para el Desarrollo para las actividades de TIC para el desarrollo dependerá de la prioridad que le den los países en desarrollo en el momento de la formulación de sus políticas y en las estrategias de reducción de la pobreza basadas en los ODM; además, hay nuevos espacios para la financiación pública procedente de bancos y donantes multilaterales. Y es probable que el DSF recolecte y desembolse fondos a nivel local.


Aún falta saber qué grado de compromiso están dispuestos a asumir los países en desarrollo para:


* Crear entornos políticos habilitantes de TIC,


* Reconocer la importancia de la libertad de expresión en relación a los derechos humanos, los procesos políticos democráticos, las campañas contra la corrupción, la transparencia en la conducta de los gobiernos y el sector empresarial, y la buena gobernanza.


Este es el lado político de la ecuación de financiación de TIC para el desarrollo –en otras palabras, se pueden tener todos los fondos del mundo, pero si no hay un correlato de políticas que abran el entorno de TIC y eliminen las barreras que impiden la difusión de internet, la información y las telecomunicaciones, el valor de dichos fondos es menordisminuirá y es poco probable que tenga un gran impacto sobre el rol de las TIC como facilitadoras del desarrollo.


Vale la pena señalar que los gobiernos del mundo en desarrollo se mostraron mucho más contentos al exigir la creación de un fondo de solidaridad digital que al examinar sus malos antecedentes en la eliminación de obstáculos, tanto para los esfuerzos de los medios comunitarios (por ejemplo, radios y redes comunitarias), como para los del sector privado.


Hacia el futuro – asuntos sin terminar y trabajo pendiente


La discusión de temas relativos al costo del software y la posibilidad de conducir alternativas que ofrece el software libre tuvo menos éxito en el PrepCom 2.


La delegación procedente de India defendió con fuerza el software libre como manera de reducir los costos de las TIC para el desarrollo, pero no se llegó a un consenso. La relación entre el software libre y la financiación de TIC para el desarrollo es un tema que merece más atención como parte de la reconfiguración de los mecanismos financieros: el software libre como mecanismo de financiación que le permite a las TIC ser efectivas en la oficialización del desarrollo en los ODM. Quizá éste sea un tema para la Conferencia ODM +5 que tendrá lugar en septiembre de 2005.


Otro tema que requiere una mayor dedicación es la relación entre gobernanza de internet, bienes públicos mundialesglobales y financiación de TIC para el desarrollo. La coalición de la sociedad civil planteó el tema de un nuevo mecanismo financiero para apoyar las TIC para el desarrollo bajo la forma de un impuesto mundial aplicable a los poseedores de nombres de dominio comerciales en internet, con el argumento de que las redes de información y comunicación constituyen un bien público mundialglobal.


Quizá sea la oportunidad para imponer un arancel internacional sobre el spam lo cual, como bien público mundialglobal, serviría para reducir la cantidad de spam en internet en beneficio de todos y, a la vez, ayudaría a conectar a los países en desarrollo a internet y capacitarlos para ello.


El tema de la Instalación de Financiación Virtual, que ya había sido planteada por el Grupo de trabajo como una de las posibles vías para coordinar entre diferentes mecanismos de financiación, se puede eliminar del texto final durante ella PrepCom 3 y quedar reducido a “proveer el apoyo financiero para influir sobre los múltiples niveles de apoyo de los programas orientados a la inclusión digital”. Ese texto no estaba terminado y habrá que trabajar un poco más para refinarafinar el concepto de una Instalación de Financiación Virtual en los próximos meses.


Hubo muchas críticas contra los términos de referencia utilizados para indicar cómo debería asignar fondos el DSF. Los latinoamericanos (GRULAC) plantearon el tema del acceso equitativo al fondo para todas las regiones, mientras que la delegación de India señaló que siguiendo la fórmula actual de financiación del DSF (60% para los países pobres menos adelantados, 30% para las economías en transición y 10% para los países industrializados), muchos países en desarrollo no tienentendrían acceso a los fondos, mientras que los países industrializados sí puedenpodrían acceder. Es clara la necesidad de ajustar el foco de atenciónenfoque del DSF y los términos de referencia.


Finalmente, es necesario analizar y desarrollar la relación existente entre el desarrollo de un nuevo marco de políticas de TIC para el desarrollo y los ODM antes de la Conferencia ODM +5 y ella PrepCom 3 de la CMSI, que tendrán lugar en septiembre, y de la segunda CMSI que se llevará a cabo en Túnez en noviembre de 2005.


Este informe fue realizado para APCNoticias por Willie Currie, coordinador del Programa de políticas de información y comunicación de APC, y miembro alternativo del Grupo de trabajo sobre mecanismos de financiación.


Referencias


1 Se puede ver el análisis de APC sobre su rol en el Grupo de trabajo en “CMSI: Participación de APC en el Grupo de Trabajo sobre Mecanismos de Financiación” http://www.apc.org/espanol/news/index.shtml?x=31182


2 Nota de la CMSI del presidente del subcomité: Revisión del Capítulo Dos de la Parte operativa (mecanismos de financiación), 1º de marzo de 2005 http://www.itu.int/wsis/docs2/pc2/off11ann1rev1.html


3 Se puede consultar la declaración de la coalición informal de finanzas en http://www.apc.org/english/news/index.shtml?x=30736 [en ingles]

Autor: —- (Willie Currie, APC)
Contacto:
Fuente: APCNoticias
Fecha: 04/04/2005
Localidad: NUEVA YORK, EEUU
Categoría: Democratización de la comunicación


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